lunes, 29 de noviembre de 2010

En el mismo sitio,sino un poquito más atrás...


Hace 11 meses y medio no escribía para este blog, mi último artículo giró en torno a cuestiones relativas al pago de salarios, atrasados en cuanto a su entrega y en cuanto a su ajuste al precio real de las cosas (Cesta Básica), también me referí al culto a la personalidad de Chávez y a cómo se manipulan las voluntades de las personas cuando quien gobierna empuña todos los poderes del Estado.


Decidí no volver a escribir en mi blog por un tiempo ya que a mi mismo me estaba pareciendo monótono mantenerme girando siempre sobre las mismas disquisiciones. Siendo también que la idea inicial de este portal era la de mostrar una mirada exploratoria del acontecer urbano visto desde las intenciones de la sociología y cruzar estas experiencias con conceptos emanados del ámbito filosófico, me estaba pareciendo que la mono/temática del super "peo" político venezolano estaba tragándose como Saturno a sus "chamos" a cualquier otra mirada perspectiva sobre la dinámica vital que me interesa estudiar, es decir lo urbano como médium de lo relacional/social, espacio para el fenómeno sociocultural en pleno acaecer.


Por estas razones he retrasado esta publicación, no he hecho esperar a mucha gente es cierto, un Blog con 16 seguidores no resulta ni por asomo uno de los más clickeados ente los de su tipo, sin embargo y aunque esto sea solo un instrumento para vocear una óptica sobre ciertas cosas, vale la pena serle congruente a los propósitos iniciales de la propuesta y ahora que decido volver, lo hago sin que haya cambiado mucho para mejor dentro del ámbito sociopolítico nacional, pero con la firme intención de mantener una regularidad de intervalo quincenal (tal vez) entre un artículo y otro.


Si mi último artículo versó sobre el pago atrasado de los aguinaldos de los profesores universitarios, a qué le podía dedicar este texto, sino a que este año, el atraso en el pago lo debemos compartir con una cantidad de gremios profesionales que se pierde de vista, con obreros del sector siderúrgico, de la construcción, del sector salud, del sector judicial, con empleados administrativos de las universidades y otros tantos entes, esto tal vez pueda ser visto como un ejemplo de la insolvencia administrativa del estado, una morosidad que se mantiene con los trabajadores asalariados venezolanos, los cuales no son precisamente "burgueses" rentistas y apátridas, o más bien es la manera como el gobierno/Chávez va mostrando la aceleración de su debacle, manifiesta en la imposibilidad de manejar las cuentas internas, de honrar los compromisos de sueldo y mucho menos de ajustar los salarios y hacerlos coincidentes con las realidades económicas presentes.


Pero ya he dicho que este artículo intenta congraciarse con los intereses primarios del portal MI-RADAS, no me dedicaré a nombrar la situación precaria de los sistemas de salud en el país, ni el drama carcelario, ni el asunto Metro de Caracas, todas situaciones que parecen morderse la cola y girar una y otra vez, una dialéctica inconclusa y perversa, o quizás todas éstas son partes de la misma circularidad trágica en la que circunvoluciona Venezuela. mucho menos escribiré algo sobre los miles de damnificados producto de las lluvias en primer lugar y en segundo término, damnificados de la miseria en la que sobre/viven en condiciones extemas aun cuando no llueve, aun cuando no tiembla, aun cuando no es el dengue o el chagas el factor que les arrincona. Para qué escribir sobre la inseguridad y los miles de muertos a manos del hampa, no lo haré, mucho menos ahora que viene diciembre y todos merecemos estar en paz con nuestros malandros los cuales también van a "pelar bolas" porque no tienen mucho que robarnos.


Luego de esto, que puedo decir si quiero afirmar que 11 meses y medio luego, este país sigue estando sino en el mismo sitio, un poquito más atrás...tal vez valga la pena señalar como algo destacable, que Alicia Machado confundió a China con Corea o siguiendo en temas asiáticos, que Chino y Nacho se ganaron un Grammy.


Illich Sánchez.

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